Si quiere saber más sobre la celulitis le diremos que se trata más de un término descriptivo que médico. Se debe a cambios fibrosos y edematosos en el tejido conectivo subcutáneo que resultan en que los depósitos de grasa subyacentes sean más evidentes, es por este motivo que la piel tiene un aspecto abultado y se conoce coloquialmente como “piel de naranja “ por su textura.
Es más común entre las mujeres debido a la diferente distribución de la grasa corporal en las mismas.
Las áreas afectadas más habitualmente son los muslos y las nalgas pero tambien aparece en el abdomen inferior, el pecho o los brazos.
Los factores que influyen en su aparición son fundamentalmente:
• Edad. La piel se vuelva menos elástica y el colágeno menos extensible, además se adelgaza y es más proclive a caer, esto último contribuye a agravar su aspecto.
• Factores hormonales. En la menopausia y debido a la caida de estrógenos se produce una alteración en la microcirculación al tejido conectivo con una menor producción de colágeno.
• Factores genéticos que determinan el nivel de metabolismo, la distribución de grasa o el nivel circulatorio.
• La dieta y el estilo de vida. Los excesos de grasa y sal, fumar, vida sedentaria y el estrés son favorecedores. Todos ellos reducen el flujo sanguíneo la producción de colágeno de calidad.
Su tratamiento se basa fundamentalmente en vigilar el peso, hacer ejercicio y dejar de fumar, todo ello combinado. Esto contribuye sin duda ninguna a mejorar el aspecto de la zona afectada. La liposucción es un tratamiento para eliminar depósitos de grasa localizados pero no para eliminar la celulitis aunque mejora su aspecto final.
Se publicitan gran cantidad de tratamientos, de los cuales ninguno tiene probada eficacia científica en cuanto a la eliminación de este trastorno. Pueden mejorar el aspecto, eso sí, pero la mejoría suele ser temporal. Es por este motivo que los hábitos de vida son un pilar fundamental en el mantenimiento del resultado de cualquier otro tratamiento.
ABR